Poner fin a la violencia contra las mujeres es un asunto de toda la población. Y desde ONU Mujeres se han identificado al menos 10 maneras de contribuir a su erradicación de forma efectiva y segura.
Antes de la pandemia por covid-19, en todo el mundo 243 millones de mujeres y niñas habían sido maltratadas por sus compañeros sentimentales en el último año.
Una verdadera pandemia que enfrentan mujeres de todas las edades en el ámbito privado y con sus compañeros sentimentales como los principales victimarios.
ONU Mujer promueve diez maneras para contribuir a erradicar la violencia contra las mujeres, incluso durante una pandemia.
1. Escucha y cree a las sobrevivientes.
Cuando una mujer comparte su historia de violencia, está dando el primer paso para romper el ciclo de maltrato. Debemos garantizarle el espacio seguro que necesita para hablar y ser escuchada.
Conviene recordar que al tratar casos de violencia sexual, la sobriedad, la vestimenta y la sexualidad de la víctima son irrelevantes. El autor es el único responsable de la agresión y debe asumir la responsabilidad por sí solo.
Protesta contra la culpabilización de la víctima y haz frente a la idea de que las mujeres deben evitar situaciones que se perciban como “peligrosas” según los estándares tradicionales.
Las sobrevivientes están alzando la voz más que nunca, y todas y todos podemos hacer algo para asegurar que se les haga justicia.
No digas “¿por qué no te fuiste de allí?”. Di: “Te escuchamos. Te creemos. Estamos contigo”.
2. Enseña a la próxima generación y aprende de ella.
El ejemplo que damos a la generación más joven determina la manera en que esta piensa sobre el género, el respeto y los derechos humanos. Inicia conversaciones sobre los roles de género a una edad temprana y cuestiona los rasgos y las características tradicionales asignadas a hombres y mujeres.
Señala los estereotipos a los que niñas y niños se enfrentan constantemente, ya sea en los medios de comunicación, en la calle o en la escuela, y hazles saber que no hay nada malo en ser diferente. Fomenta una cultura de aceptación.
Habla sobre el consentimiento, la autonomía física y la rendición de cuentas a niñas y niños, y escucha también lo que tienen que contar sobre su experiencia en el mundo. Al dotar a jóvenes activistas con información y educarlos sobre los derechos de las mujeres, podemos construir un futuro mejor para todas y todos.
3. Exige respuestas y servicios adecuados para su propósito.
Los servicios para las sobrevivientes son servicios esenciales. Esto significa que para las sobrevivientes de la violencia de género debe haber refugios, líneas de atención telefónica, asesoramiento y todo el apoyo que necesiten, incluso durante la pandemia del coronavirus.
Cada año, la campaña de 16 Días de activismo pide una acción colectiva y global para poner fin a todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas. Las Naciones Unidas, junto con entidades asociadas, están exigiendo cuatro medidas críticas: FINANCIAR, RESPONDER, PREVENIR, RECOPILAR.
Únete para instar a los gobiernos a que: subsanen las brechas de financiación para abordar la violencia contra las mujeres y las niñas, garanticen que los servicios esenciales para las sobrevivientes de violencia se mantengan durante esta crisis (covid-19), apliquen medidas de prevención, e inviertan en la recopilación de los datos necesarios para adaptar y mejorar los servicios que salvan vidas de mujeres y niñas.
4. Comprende qué es el consentimiento.
El consentimiento convencido dado libremente es imprescindible, en todo momento.
En lugar de oír un “no”, asegúrate de oír un “sí” activo que haya sido expresado por todas las personas involucradas. Integra el consentimiento convencido en tu vida y habla de él.
Frases como “se lo estaba buscando” o “los hombres así son” intentan desdibujar los límites del consentimiento sexual, culpabilizar a las víctimas y exculpar a los agresores del delito que han cometido.
Puede que las personas que usan estas expresiones entiendan el consentimiento como una idea vaga, pero la definición es muy clara. Cuando se trata de consentimiento, no hay límites difusos.
5. Conoce los indicios del maltrato y aprende cómo puedes ayudar.
Hay muchas formas de maltrato y todas ellas pueden dejar secuelas físicas y emocionales graves. Si te preocupa una amiga que pueda estar sufriendo violencia o que se siente insegura junto a alguien, revisa los indicios de maltrato y aprende las maneras de ayudarla a encontrar seguridad y apoyo.
Si crees que alguien te está maltratando, hay ayuda disponible. No estás sola. Si quieres hablar con alguien con conocimientos en el tema a través de una línea de ayuda, hay recursos disponibles en todo el mundo.
6. Inicia una conversación.
La violencia contra las mujeres y las niñas constituye una violación de los derechos humanos que ha sido perpetuada durante décadas. Es omnipresente, pero no es inevitable, a menos que permanezcamos en silencio.
Demuestra tu solidaridad con las sobrevivientes y tu postura en la lucha por los derechos de las mujeres.
7. Demuestra tu oposición a la cultura de la violación.
La cultura de la violación se da en entornos sociales que permiten que se normalice y justifique la violencia sexual, y en estos entornos se alimenta de las persistentes desigualdades de género y las actitudes sobre el género y la sexualidad. Poner nombre a la cultura de la violación es el primer paso para desterrarla.
Cada día tenemos la oportunidad de examinar nuestros comportamientos y creencias en busca de los sesgos que permiten que siga existiendo la cultura de la violación. Piensa en cómo defines la masculinidad y la feminidad, y cómo influyen tus propios prejuicios y estereotipos.
Desde nuestra actitud acerca de las identidades de género hasta las políticas que apoyamos en nuestras comunidades, todo el mundo puede tomar medidas para luchar contra la cultura de la violación.
Conoce más maneras de oponerte a la cultura de la violación.
8. Haz donaciones a organizaciones de mujeres.
Haz donaciones a organizaciones locales que ayudan a las mujeres, amplifica sus voces, apoya a las sobrevivientes, y promueve la aceptación de todas las identidades de género y sexualidades.
ONU Mujeres trabaja con organizaciones de mujeres en todas partes para poner fin a la violencia contra las mujeres, ayudar a las sobrevivientes, y asegurar la igualdad de derechos para las mujeres y las niñas de todo el mundo.
9. Sé responsable y exige responsabilidades a los demás.
La violencia puede adoptar muchas formas, incluido el acoso sexual en el lugar de trabajo y en los espacios públicos. Pronúnciate contra ciertos comportamientos señalándolos: los silbidos, los comentarios sexuales inapropiados y los chistes sexistas nunca son aceptables.
Promueve un ambiente más seguro retando a tus compañeras y compañeros a reflexionar sobre su propio comportamiento y manifestándote cuando alguien se pase de la raya, o pidiendo ayuda a otras personas si sientes algún temor.
Como siempre, escucha a las sobrevivientes y asegúrate de que tengan el apoyo que necesitan.
10. Conoce los datos y pide más información.
Para combatir eficazmente la violencia de género, es necesario entender bien la cuestión.
La recopilación de datos pertinentes es fundamental para aplicar con éxito medidas de prevención y proporcionar a las sobrevivientes el apoyo adecuado.
Debido a que la violencia de género ha aumentado durante la pandemia de COVID-19, las brechas en la recopilación de datos sensibles al género son más evidentes que nunca.
Pide a tu gobierno que invierta en la recopilación de datos sobre la violencia de género.
Descubre en https://data.unwomen.org/ de qué forma trabaja ONU Mujeres para lograr un cambio radical en cómo se usan, crean y promueven las estadísticas de género.